Almohadas

Si al levantarte sentís dolores de cabeza o dolor de cuello y no tenés problemas cervicales, el problema puede ser la almohada. Es importante elegir bien... Algunos tips.

 

 

A veces dormimos incómodos y nos despertamos con la sensación de haber pasado una mala noche, con poco descanso. Los dolores se imponen ni bien nos levantamos y quisiéramos que el día termine ya... Pues bien: es fundamental hacer algo. Si sentís dolores de cabeza o dolor de cuello y no tenés problemas cervicales, el problema puede ser la almohada.
Nuestro cuerpo está diseñado para soportar el cuello y la columna mientras caminamos, pero cuando nos acostamos el cuerpo se relaja y es necesario "depositarlo" sobre un soporte adecuado. Claro que cada persona tiene gustos diferentes a la hora de elegir el colchón o la almohada, y que hay maneras distintas de conciliar el sueño, pero es clave tener en cuenta algunas cosas.
La almohada ideal debe sostener tu cuello de la misma manera en que tus músculos y vértebras lo mantienen cuando usted está de pie. A su vez, el material externo y el relleno deben ser confortables al tacto.
También es importante considerar la altura de la misma: si el colchón es duro, tendremos que usar una almohada más bien alta, porque al no hundirse el cuerpo la cabeza estará en una posición más elevada. Todo lo contrario si utilizamos un colchón blando: al hundirnos habrá menos altura hasta nuestra cabeza, por lo cual la almohada deberá ser más baja.

En EL DESCANSO  encontrarás una gran variedad de almohadas para elegir tu accesorio ideal.